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Foto del escritorPaulo Bezerra de Melo

¿Qué hicimos con la fotografía?


En esta imagen, una familia disfruta del viaje en barco, en ningún momento recogieron su teléfono móvil, disfrutaron del recorrido, vivieron una experiencia juntos. Me gustaría mucho compartir con su lector algunas observaciones sobre nuestro tiempo y algunas preguntas sobre la fotografía. Desde que era niño me ha fascinado esta increíble forma de expresión de la humanidad. Durante muchos años he dedicado mi vida no solo a la fotografía, sino a todo lo que aporta la fotografía. Creo que hay arte en la fotografía, la poesía, el movimiento, hay abstracción, mensajes, hay textos, informes, hay inquietud, acción, paz, comodidad, hay algo en él que solo la filosofía puede revelar. ¡Quizás la fotografía sea tan compleja que aún no tenemos la dimensión real de su fuerza! El término fotografía significa dibujar con luz. ¡Muchos hablan de varios aspectos de su naturaleza y poder! Si miramos más profundo, se nos ocurrirá algo extraordinario. La fotografía es el arte de congelar la luz, el tiempo y el espacio, eternizándolos en un trozo de papel. Haz una foto, mírala con cuidado. No verás solo una imagen, verás un momento de tiempo, que contiene un pedazo de nuestro espacio, que a través de la luz, se usó en ese momento para fijarse allí. Es un relato de algo que realmente sucedió, una realidad presente, que viene del pasado. Cada fotografía es un viaje al pasado, desde el momento en que se tomó. Y nunca puede ser lo mismo. Bueno, la fotografía es un momento en el tiempo que se grabó y que, de hecho, existió y sigue existiendo en el presente, incluso del pasado. La fotografía trae emoción, está cargada de significados y una forma infinita de interpretaciones, porque en cada ser tiene la capacidad de despertar algo inusual. ¿Si no tuvieras de ninguna manera una forma de retratar todo lo que sucede a tu alrededor? ¿Si no tuviste la oportunidad de grabar un momento importante de tu vida? ¿Cómo sería tu vida hoy sin esta tecnología? En los primeros días de nuestra existencia, no teníamos las tecnologías necesarias para tal situación. Después de años de evolución, nuestra especie da sus primeros pasos hacia lo abstracto, mostrando con pinturas en paredes de cuevas y piedras alrededor de sus viviendas primitivas, situaciones de su vida cotidiana y eventos de gran importancia hasta entonces. Nuestra necesidad de expresión es tan primitiva como la propia comunicación, y todo esto ha ido evolucionando. En tiempos más remotos, la fotografía era un acontecimiento peculiar. La gente se reunió para tomar una foto, de hecho fue un evento. Después de unos años comenzó a hacerse popular, pero con sus restricciones. La fotografía llegó a ser vista como una forma de arte, especialmente por los fotógrafos que comenzaron a usarla para este propósito. La fotografía se utilizó de varias maneras, registros de viajes y expediciones, informes de descubrimientos, guerras, hambrunas, grandes eventos, etc. ¡La fotografía se ha convertido en una parte indivisible de nuestras vidas! Hoy en día la fotografía se ha vuelto popular como nunca antes, todo gira en torno a fotos y vídeos. Ahora tenemos la necesidad de mostrar todo lo que hacemos, queremos compartirlo con nuestros amigos, familiares y personas que ni siquiera conocen nuestra rutina. Las redes sociales y la tecnología aceleran nuestra hambre de fotografía. Nadie imaginaría a nadie fotografiando un huevo para desayunar justo al principio de este increíble descubrimiento. Fotografiar era caro, se necesitaba mucho, mucho conocimiento y técnica, algo que no se podía desperdiciar con una foto de algo tan común. No estoy en contra de lo que la gente hace hoy, pero echo de menos el romanticismo que se ha ido. Sentarse y abrir un álbum de fotos, parar a tomar un café y recordar el pasado. Recuerda momentos especiales y experimenta todas las emociones que contenían allí. Hoy estamos atrapados en esta gran ola de sentimiento popular, de tener la aprobación de personas que ni siquiera conocemos, le gusta, comentarios, puntos de vista, etc. Nos hemos vuelto inmediatos hasta el extremo. No sé si esto es realmente una evolución, ¡me pregunto todos los días si vamos por buen camino! Antes, esperábamos la llegada del álbum, con ese frío en el vientre para saber lo que nos esperaba, para reconocernos, para ver todo lo que habíamos grabado para recordar lo que vivíamos. Hoy estamos esperando una recompensa inmediata, ¡queremos todo a tiempo! ¿Ha cambiado la fotografía o fuimos nosotros los que la cambiamos? Hoy no queremos revivir lo que vivimos, sino mostrar lo que somos capaces de vivir. ¿Es culpa de la fotografía? ¿O nos estamos perdiendo con esta fantástica forma de expresarnos? ¿Realmente lo estamos usando en todo su potencial? ¿Necesitamos reflexionar sobre lo que estamos haciendo con nuestras vidas? Nunca en la historia hemos informado de tantos casos de ansiedad y depresión. Los expertos dicen que gran parte de todo esto se debe al alto grado de exposición que estamos recibiendo. Dejemos una cosa muy clara, no estoy en contra de las redes sociales, ni siquiera de las personas que fotografían un huevo para desayunar, ya lo he hecho yo mismo, uso las redes sociales. Me encanta la fotografía cotidiana, me encanta fotografiar comida y cosas al azar. Y por eso escribo sobre este tema. No es la fotografía, no es la película, es nuestra vanidad, nuestro deseo de afirmarnos dentro de nuestras comunidades, dentro de nuestros círculos sociales lo que está causando toda esta confusión. Esto se denomina aprobación social. Tal vez nuestros excesos estén destruyendo a toda una generación. Hemos perdido la capacidad de crear nuestros deseos, de desear lo que otras personas están viviendo. Estar constantemente influenciado por aquellos que viven en la esclavitud del contenido diario e inmediato. Muchas personas dejaron de comprar libros, para leer extractos cortos, de contenido superficial, escritos por expertos formados por sus equipos de marketing. No reprocho de ninguna manera quién crea contenido, no se trata de quién crea, o de quién observa, ni de la calidad del contenido en sí, sino de quién no entiende lo que representa. Espero que entiendas mi retórica, no quiero juzgar a nadie, sino hacer una alerta, una simple reflexión, para que todo esto que absorbemos hoy no sea un desencadenante de tristeza, sino de esperanza. Muchas personas se ven a sí mismas en el fondo, creyendo que su vida es aburrida, porque constantemente ven a la gente en hermosos paseos, riendo, felices, comiendo, bebiendo, mostrando sus hermosas casas, sus coches de lujo, lo que ganan, lo que tienen, etc. Estoy feliz de ver a la gente feliz, pero hay gente que no sabe cómo lidiar con tales situaciones. Empiezan a entrar en una bola de nieve, dejan de ver que su vida puede tener un gran valor, en comparación con otras personas en su propia vida. Justificando tu fracaso en el éxito del otro. Culparse a sí mismo por no poder experimentar tanto. Creo que las redes sociales son increíbles, creo que estas herramientas que conectan a las personas son fantásticas, ahora tenemos la oportunidad de ver todo el mundo, las culturas, la gastronomía, la arquitectura, las enseñanzas, la diversión, tenemos la oportunidad de viajar a otros lugares en solo un instante. Tenemos la oportunidad de mostrar nuestro trabajo, expresar nuestras opiniones, enseñar y compartir información tan importante. Proporciona todo esto junto con la fotografía y la videografía. Creo que si sabemos cómo tener equilibrio y no vivimos apegados a eso solos, podemos crecer y aprender mucho unos de otros. Tenemos que tener filtros, tiempo de dosis, sin olvidar que la vida real no está ahí. La vida real se cuenta con humanos desconectados de Internet. ¡Esa es la vida del otro y no la tuya! ¡¡Presta atención!! La mayoría de las personas no hacen un registro sobre algo, quieren exponer algo. Hay una diferencia en registrar algo y exponer algo. ¿Es la felicidad exponer todo lo que hacemos? Muchos lo hacen por la memoria de los demás por el hecho de que exponen y en sus corazones, saben que no fue por un día recordar, sino para afirmar que están aquí o allá, comiendo esto o aquello, comprando esto o aquello, de esta manera podemos ver que no fue por el registro, fue por el deseo de aparecer. Empezamos a usar la fotografía y la videografía en muchos casos, ya no como una herramienta para grabar o crear artes, sino como una herramienta para alimentar nuestro ego. Alimenta la vanidad, el orgullo y trata de anular al otro menos favorecido. Recordando que no todas las personas hacen esto, e incluso todo dependerá de la interpretación de aquellos que lo visualicen. Si abrimos los ojos veremos que este hecho es más real de lo que imaginamos, incluso muchas veces ya lo he hecho. Realmente quiero evolucionar sobre esta dependencia que fue creada inconscientemente por la vana disputa de muchos y termina contaminando a una gran parte de la población. Voy a informar de algo que puede que tengas una pequeña idea de lo que estoy diciendo. Día de los Abuelos, muchos toman una hermosa foto, sonriendo y con la familia juntos, los que están fuera imaginan, lo hermoso que es esto, yo también quería a mi familia así, en realidad eso era solo una imagen, creando un mensaje de felicidad, fraternidad y unidad. Los abuelos se quedaron como de costumbre en una mecedora viendo a sus hijos y nietos pasar el día con el teléfono móvil en la mano. No escucharon historias, ni tomaron los álbumes de fotos, no pidieron consejo, ni prestaron la debida atención a aquellos que tanto lo necesitaban. Tomaron fotos de los platos, las bebidas, el postre, y finalmente dieron un abrazo de despedida, pensando que estaban allí, pero no lo estaban, estaban conectados con otros que hicieron lo mismo. Solo quiero dejar una simple reflexión sobre la importancia de la fotografía, cómo la estamos usando y cómo podemos vigilarnos con su uso. Es algo tan increíble que hoy compramos un dispositivo de comunicación de voz, y el primer requisito es saber si tiene una buena cámara, si el dispositivo es rápido, si tiene suficiente espacio, ni siquiera nos detenemos a observar que su propósito es llamarnos unos a otros.


Empieza a imprimir tus fotos, siéntate juntos, contempla ese momento vivido en el pasado, feliz en el presente por tener la oportunidad de revivir todo lo que se ha vivido hasta ahora. No dejan sus vidas resumidas en imágenes pegadas en ninguna red social. De hecho, una fotografía se convierte en una fotografía cuando se imprime.




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